¡No puedo más! ¡No consigo quitarme los cólicos ni con ibuprofeno ni con Enantyum. Me dice el ginecólogo que es un dolor normal por la herida interna, que nada tiene que ver con los cólicos que tenía con la regla, ¡pero estos son los mismos dolores! ¡Los sufrí durante más de 20 años! Consigo diferenciar los gases de los cólicos, ya que sufro de ambos, y no tienen nada que ver.
¡Dos semanas con dolores todos los días durante todo el día! Algunas horas me viene más fuerte, pero es bastante incómodo. Sigo decepcionada, supongo que tendré que seguir esperando. Son varios niveles de dolor. En estos momentos, que son las 2 y media de la madrugada del jueves, son muy leves (como un suave ronroneo). Hace unas horas fue algo más fuerte (como si se me estuvieran revolviendo las tripas, pero no son gases), tanto, que fui corriendo al baño... Al mediodía consiguió que "taconeara" (como si alguien me estuviera martillando el estómago). Y esta mañana comenzaban los dolores (como un dolor de cabeza que va aumentando). Afortunadamente no ha sido tanto como para endemoniarme.
Ya consigo dormir boca abajo, y vaya si lo hago, ¡todas las noches! De lado también y sin ningún dolor. Me acuesto en la cama (sigo durmiendo en la azotea) como si nada. Eso sí, las escaleras las bajo con ambas piernas en cada escalón (en pocas ocasiones lo hago de forma normal). No me atrevo a levantar peso (más de 5 kilos), no vaya a ser que me dé una hernia como me dijo el ginecólogo.
Finalmente me he acostumbrado al aceite de rosa mosqueta de Mercadona. Al principio prefería la crema, pero aquella es mucho más manejable, aunque pringosa. Pero al ser más suave y menos consistente que la crema, consigo aplicarla a la herida casi sin dolor (es muy leve, la rozadura es inevitable). La zona de mi estómago está más sensible, y aún no me he atrevido a cerrarme los pantalones vaqueros (única prenda que utilizo, aparte del pijama en casa, obviamente). Incluso la herida está algo más atenuada (los puntos que agarraban las grapas, porque la sonrisa de la herida se nota mucho). Es un verdadero suplicio cuando tengo que salir a la calle, así que la mayoría de mis días de baja, me quedo en casa durante todo el día (tampoco hay mucha diferencia cuando no trabajo).
El 24 de mayo tuve cita con mi médico de cabecera, me ha dado cita para el próximo 7 de junio, sigo de baja. El 6 tengo psicólogo. Ya recuerdo qué tipo de depresión me dijo el psiquiatra hace un mes: depresión endógena (cumplo en un 99% con los síntomas basándome en esta página). Afortunadamente se trata de mi falta de autoestima, y digo afortunadamente, porque no es trastorno bipolar ni esquizofrenia o cualquier otra depresión mucho más grave... únicamente, que no me quiero y tengo que aprender a quererme y creerme. Curiosamente, la histerectomía no forma parte de mi depresión (sobre todo porque ni tengo hijos ni los voy a poder tener, al menos desde mi vientre).
Salvo los cólicos y que me subo por las paredes porque no puedo hacer trabajos forzosos, lo demás va bien. Ya consigo estornudar, toser y reírme sin que me duela.
El viernes pasado llamé a Pilar y me dijo que estaba mucho mejor de su rodilla. De María no sé nada...
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Aún me duele el dedo gordo del pie cuando hago algún movimiento brusco sin querer. En cuanto al moretón, se ha atenuado.
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